Muchas veces, cuando uno, viajero inexperto busca en la maravillosa internet, “cómo llegar barato de X a Y”, espera que le digan algo tan simple como -para poder viajar barato de Kanchanaburi a Sukhothai, en vez de tomarte ese bus que sale 500 bath, tomate éste otro que sale 100 bath.-
Bueno, eso pasa sólo en las películas, y cómo lo aprendimos nosotros? como todo, a los cachetazos!
En fin, estábamos en Bangkok, y nuestra idea era dirigirnos hacia el norte, haciendo el camino menos típico (dentro de la medida de las posibilidades). O sea, sin ir directo a Chiang Mai, sino conociendo que hay en el medio de esas dos grandes ciudades Tailandesas (les aseguro que mucho).
Para empezar, nos tomamos un tren hasta Kanchanaburi. Hasta ahí todo RE “tobara” y cheto (mentira, el tren era uno de los mas incómodos del mundo – y viajé en el Sarmiento en hora pico-, y para colmo de males, era época de Songkran – si querés leete la anécdota de ésta festividad ACÁ– así que cada dos por tres recibíamos un baldazo de agua por la ventanita, HARmoso).
Aah, pero la aventura empieza acá, cuando quisimos ir desde Kanchanaburi a Sukhothai. ¿Qué pasó? El único bus que iba directo desde ahí salía más o menos lo mismo que irnos hasta Bangkok y después a nuestro destino. Éste tenía aire y todos los chiches, pero NO, NO, NO, NO, nos negamos; estaba completamente fuera de nuestro presupuesto y no podía ser la única opción.
Y no lo fué. Luego de una exhaustiva investigación de todos las ciudades habidas y por haber entre los puntos A y B, y ver qué colectivos iban a esos lugares terminamos encontrando el siguiente trayecto: Tomábamos un bondi hasta Suphan Buri, de ahí otro hasta Nakhan y luego un tercero hasta Sukhothai.
Posts que te pueden interesar
Bueno, en algo de todo esto tuvimos razón… porque haciendo esto no gastamos ni la mitad de lo que salía el otro, asique PUNTO PARA CONMOCHILA!
Lo que no teníamos idea era de a qué nos ibamos a enfrentar…
El primer bus tardó 2 horas en llegar a la primera conexión. De hecho, cuando salía de la estación chocó con un auto y nos tuvieron ahí como media hora (No sabemos si no se ponían de acuerdo con el seguro o estaban tratando de desencajar el bus del pobre autito).
Como si fuera poco, el bus no tenía aire ni nada, tenía ventiladores que solo se prendían cuando éste se detenía. Cuando estaba en marcha se apelaba al vientito que entraba por la ventana (con 43 grados, te imaginas el vientito?).
Los asientos eran MINIMOS, la persona mas delgada de Argentina igual hubiera tenido problemas para compartir el asiento. Iba abarrotado de gente, y a todo esto, no lográbamos que la boletera nos entienda que despues queríamos saber que bus tomarnos para ir al siguiente destino. AGOTADOR.
Esto no es nada, lo peor vino cuando llegamos a Suphan Buri, con ganas de tomarnos una coca fría, un agua helada, comer fruta o CUALQUIER COSA, pero no pudimos. La boletera que algo de lo que le dijimos había entendido… nos bajó a las corridas del colectivo y a los tirones nos subió a otro de las mismas características que también iba llenísimo de gente.
Así y todo seguimos nuestro camino, ahora preguntándonos, si efectivamente estábamos yendo a donde queríamos. Cada vez que hablábamos con alguien, nos miraban, sonreían y negaban con la cabeza. Es el día de hoy que no sabemos qué nos querían decir.
Gente, éste viaje duró 5 horas, horas que en mi cuerpo y mente se sintieron como 73. Con un calor insoportable, y con paradas constantes porque a la gente en estos países les encanta bajar y comprar cada 1 hora algo en el kioskito.
Pero como en toda historia, tiene que haber un final feliz, un oasis en medio del desierto, ésta no podía ser la diferencia.
Efectivamente, ese bus nos llevaba hasta nuestro destino NAKHAN (bueno, 2° destino), y no sólo eso. Compramos los tickets para ir hasta Sukhothai y nos alegramos al saber que …. el bus … tenía …. AIRE ACONDICIONADO. Lágrimas, lágrimas de toda la coca que habíamos tomado a lo largo de todo el trayecto, cayeron por nuestra caras.
Finalmente, llegamos.
Qué aprendimos? Viajar barato muchas veces es para aquel que tiene paciencia y muuucho tiempo. Suele tener matices mucho más complicados, por lo que si viajas por pocos días, te conviene ahorrar en tiempo y no en dinero. Si viajas como nosotros, y estás siempre dispuesto a la aventura entonces vení y contanos tu odisea personal